Leyenda del Cristo de la Vega

   

          Con el Cristo de la Vega como testigo, Don Diego juró matrimonio a Doña Inés, Cristo al que ambos veneraban.

 

        Al ver Doña Inés que Don Diego no cumplía con su palabra a su vuelta de Flandés, un día, fue Doña Ines a ver al comendador, Don Pedro Ruiz de Alarcón, famoso por sus sentencias y por su sabiduría.

          Fue a denunciar por perjuro a Don Diego, explicándole lo ocurrido. El comendador hizo llamar a don Diego ante él, y éste negor conocer a Doña Inés, diciendo que estaba mintiendo. Ante este testimonio de Don Diego, Doña Inés dijo al comendador, tener un testigo de todo lo que había dicho, El Cristo de la Vega.

           Ese mismo día, se dirigió un grupo de personas a la ermita y a los pies del Cristo se dispusieron el Comendador, Doña In´ñes, Don Diego, 4 funcionarios, 2 ayudantes y 1 escribano.

 

 

  

 

           El comendador, dirigió al Cristo de la Vega con los evangelios en la mano y le dijo:

          “Jesús, hijo de María, juráis ser cierto que ante vos prometió Don Diego a Doña Inés desposar?

           “¿juráis haber sido testigo de lo que aquí se ha relatado?

          Una poderosa voz afirmó:

      “Sí, juro”, mientras Cristo bajó el brazo y lo puso sobre los evangelios.

 

 

         

 

 

 

          Don Diego tomó los hábitos avergonzado y Doña Inés entró en un monasterio.

          Don Pedro Ruiz de Alarcón, continuó impartiendo justicia, sintiéndose protegido por el más alto testigo que ningún juez tendrá nunca.

 

 

FUENTES:

 

  • Libro:

“La vuelta a Toledo en 80 leyendas”.

         De Javier Mateo y Álvarez de Toledo, y Luis Rodriguez Bausá.

 

  • Fotografías de

Angel Martinez Torija.

Categorías: leyendas

Escribe un Comentario

Tu dirección de email no aparecerá publicada.
Los Campos Obligatorios están marcados con*